En San Miguel de Allende sus locatarios del Centro Histórico sienten que sus vidas corren peligro por las constantes extorsiones de las que han sido víctimas, al señalar que los quieren obligar a que vendan drogas en sus establecimientos, por tanto se han visto obligados a cerrar las pintorescas y ya tradicionales cantinas ante el temor que sienten.

Con gran temor y preocupación los comerciantes de San Miguel de Allende en Guanajuato, denunciaron que apenas hace tres semanas unos tipos habían dejado unas maletas las cuales contenían en su interior tanto marihuana como varias dosis de cocaína, todo esto acompañado por un escrito en el que se les advertía que tenían un total de 22 días para vender el cargamento. 

El gran miedo de los locatarios los ha llevado a despojarse de su modo de vivir y trabajar, siendo que tan sólo en el primer cuadro de San Miguel de Allende se han visto obligados a cerrar cinco locales. 

Bajo el anonimato y por temor a las represalias, los comerciantes señalan que tomaron la dura decisión de cerrar sus cantinas antes de que llegara el plazo mencionado en la hoja de papel escrita a mano que acompañaba a la droga.