Internacionales
En España, hombre de 300 kilos es trasladado al hospital por el balcón
Un hombre de 300 kilos de peso tuvo que ser evacuado por el balcón de su casa en España y trasladado al hospital con una autogrúa de los Bomberos y una camilla reforzada con una estructura diseñada por una empresa especializada en montajes de espectáculos.
José María Fernández, quien padece obesidad mórbida, fue llevado al hospital de San Fernando (sur de España) para recibir tratamiento médico en un laborioso y novedoso operativo. Los Bomberos prepararon un complicado dispositivo durante varios días para lograr sacar a Fernández, quien llevaba seis meses postrado en la cama de su casa, a través del balcón utilizando una camilla reforzada.
Fue necesario retirar rejas del balcón para completar la operación con éxito. Un equipo médico acompañó al paciente en todo momento, con la colaboración de la Policía que cortó la calle para facilitar el traslado.
En el hospital, se acondicionó una habitación con las condiciones necesarias para recibir a un paciente de tales dimensiones y se adquirió una cama especial para obesidad mórbida. La cama, que funciona como una báscula, permitirá conocer el peso exacto de José María Fernández para adquirir un arnés y una grúa que faciliten su manejo de manera adecuada.
Los problemas de obesidad del paciente empeoraron el año pasado debido a una depresión que lo llevó a superar los 300 kilos de peso, impidiéndole levantarse de la cama.
Desde 2019, José María Fernández cuenta con una ayuda a la dependencia que ha ido aumentando con el tiempo. Gracias a la ayuda de varias personas, incluyendo el propietario de un gimnasio, el paciente ha logrado mejorar su nutrición y movilidad. “Lo hemos conseguido”, celebró el entrenador en las redes sociales, agradeciendo la repercusión alcanzada por este caso.
Internacionales
Israel habría detonado dispositivos explosivos ocultos en bípers de Hezbolá
Israel manipuló dispositivos localizadores vendidos a Hezbolá en Líbano, colocándoles explosivos que fueron activados de manera remota el pasado martes, según el New York Times. El ataque dejó al menos nueve muertos y cerca de 2,800 heridos, según el Ministerio de Salud del Líbano. Los localizadores habían sido adquiridos por Hezbolá recientemente para reemplazar celulares y evitar ser rastreados por Israel.
El ataque, que afectó principalmente a áreas bajo el control de Hezbolá en Líbano y Siria, fue atribuido a un “ataque cibernético israelí”, según fuentes del gobierno libanés y Hezbolá. El Estado israelí no ha emitido un comentario oficial sobre el incidente, aunque es conocido por mantener una política de silencio en estos casos. Estados Unidos negó cualquier implicación en la operación.
El Ministerio de Salud libanés informó que los dispositivos explotaron casi al mismo tiempo, causando lesiones severas en manos, rostros y zonas abdominales. Entre los afectados se encontraba el embajador de Irán en Líbano, quien sufrió heridas leves. La mayoría de los heridos se encontraban en áreas densamente pobladas como el sur de Beirut y la región de Becá.
Este ataque ocurre en medio de crecientes tensiones entre Israel y Hezbolá, que se intensificaron tras los enfrentamientos en la frontera entre ambos países desde el inicio de la guerra en Gaza el 7 de octubre. Hezbolá advirtió que Israel sería responsable de las consecuencias del ataque, y el grupo prometió tomar represalias.