Nacionales
VÍDEO | Hombre mata a su esposa y le arranca la piel
Un hombre se valió de un desencuentro para asesinar a su esposa de forma violenta dentro de su vivienda, en la Colonia Vallejo, en Gustavo A. Madero.
El individuo, identificado como Erik Francisco “R”, de 46 años, utilizó un cuchillo de cocina para apuñalarla y después le desgarró la piel de casi todo el cuerpo.
Según reportes policiales, la agresión se registró durante la madrugada, luego de que ambos sostuvieran una discusión de pareja.
Las primeras indagatorias indican que la víctima, identificada como Ingrid “E”, de 25 años, era el segundo matrimonio del sujeto.
Ambos vivían en el departamento donde ocurrió el feminicidio, localizado en Francisco Tamagno 258 casi esquina con Schumann.
Policías del Sector Tepeyac fueron movilizados al sitio y notaron que el hombre tenía rastros de sangre en su ropa, por lo que fue asegurado.
Al ingresar a la vivienda, ubicado en el quinto nivel, descubrieron el cadáver de la joven en una de las habitaciones.
“Al ingresar al domicilio, se encuentra una persona del sexo femenino sin vida”, indica el informe policial.
El cuerpo estaba tirado en el suelo en posición boca arriba; sólo conservaba el cuero cabelludo y parte de piel de las rodillas hacia abajo.

A los costados había una bolsa de color verde y encima de sus piernas descansaba el cuchillo.
El agresor fue puesto a disposición de la Fiscalía de Homicidios, donde se inició una carpeta de investigación bajo el protocolo de feminicidio.
La Fiscalía capitalina también verifica si el detenido arrojó parte del cadáver de su esposa en la vía pública, pues a 7 cuadras del inmueble, en la esquina de León Cavallo y Pedro Luis Ocazón, vecinos localizaron restos de piel humana y tejido adiposo.
Nacionales
Restaurante flotante reactiva economía y se convierte en punto de encuentro en Coatzacoalcos
El arribo de un restaurante flotante a las playas de Coatzacoalcos no solo despertó curiosidad entre los habitantes, sino que también ha contribuido a reactivar la economía local.
Decenas de familias han acudido al malecón costero para tomarse fotos, convivir y disfrutar del ambiente, mientras comerciantes de nieve, cocos, chicharrones y antojitos aprovechan el incremento en la afluencia de visitantes.
Lo que en un inicio llegó como consecuencia de las inundaciones en el norte del estado, hoy se ha transformado en un espacio de reunión familiar y atractivo turístico improvisado en la ciudad.





