Internacionales
Papa celebra el Miércoles de Ceniza con nuevo rito por COVID-19 [VIDEO]

El papa Francisco presidió la ceremonia del Miércoles de Ceniza en el Vaticano, que marcó el inicio de la temporada de Cuaresma de la Iglesia católica en la Basílica de San Pedro.
Antes de la pandemia de coronavirus, la ceremonia solía ver a los sacerdotes rociando cenizas y marcando una cruz en la frente de los fieles.
Este año, el clero solo pudo esparcir cenizas en la parte posterior de la cabeza y mantener los cubrebocas, para respetar las medidas de seguridad.
“Las cenizas en nuestra cabeza nos recuerdan que somos polvo y al polvo volveremos. Sobre este polvo nuestro, Dios sopló su espíritu de vida. Así que ya no deberíamos vivir nuestras vidas persiguiendo polvo, persiguiendo cosas que están aquí hoy y mañana se van”, declaró el pontífice durante la ceremonia.
#Entérate | El papa Francisco celebró la ceremonia del Miércoles de Ceniza sin cruz en la frente, marcando el inicio de la temporada de Cuaresma de la Iglesia católica en la Basílica de San Pedro. pic.twitter.com/O5RVqg0846
— Panorama Sin Reservas 620 AM (@sinreservas620) February 17, 2021
Francisco, que normalmente marca el inicio de la temporada penitencial con una procesión al aire libre entre dos iglesias antiguas en Roma, limitó la ceremonia a una misa para unas 120 personas en la Basílica de San Pedro.
El Papa, que fue el único que no usó cubrebocas durante el acto, recibió las cenizas del cardenal Angelo Comastri.
En su sermón, el Papa dijo que la Cuaresma debería ser una oportunidad para dejar atrás “la falsa seguridad del dinero y las comodidades (…) que persiguen cosas que están aquí hoy y mañana se van” y regresar a Dios.
“La Cuaresma es un descenso humilde tanto hacia adentro como hacia los demás. Se trata de darnos cuenta de que la salvación es no un ascenso a la gloria, sino un descenso por amor. Se trata de hacerse pequeño. En este camino para no perder la orientación, estemos ante la cruz de Jesús: el trono silencioso de Dios” dijo.
Durante la Cuaresma, que finaliza con la Pascua, los cristianos están llamados a ayunar, practicar más buenas obras, dar limosna, estar cerca de los necesitados y los que sufren y renunciar a algo, como los dulces.
El mes pasado, el Vaticano emitió pautas para el Miércoles de Ceniza en la era del covid-19.
Explicó que los sacerdotes deberían esparcir cenizas en la cabeza en lugar de frotarlas en la frente y recitar con mascarilla el tradicional “Recuerda que eres polvo y al polvo volverás” por única vez ante todos y no para cada congregante.
El Vaticano lanzó su programa de vacunación el 13 de enero, administrando la vacuna Pfizer.
Internacionales
Donald Trump ordena implementar la pena de muerte en Washington D.C.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó un memorándum dirigido a la fiscal general, Pam Bondi, y a la fiscal del Distrito de Columbia, Jeanine Pirro, en el que instruye la implementación “plena” de la pena de muerte en la capital estadounidense. La medida revierte la abolición de la pena capital en Washington D.C., vigente desde 1981, y busca responder a lo que la administración califica como un aumento de la criminalidad en la ciudad.
Según el memorándum, los fiscales federales deberán buscar la pena de muerte en todos los casos apropiados bajo la legislación federal, particularmente en delitos graves como homicidios y asesinatos de agentes de policía. Además, se indica que ejercerán jurisdicción federal para garantizar la aplicación de la pena capital, en lo que la administración Trump considera una acción necesaria para mantener la seguridad.
La decisión ha generado un amplio debate. Expertos legales y organizaciones de derechos civiles han expresado su preocupación por la posible violación del derecho de autogobernanza de Washington D.C., cuya población ha rechazado la pena de muerte en referendos anteriores. También se cuestiona el impacto de esta medida sobre las normas legales y la autonomía local.
Esta acción forma parte de una serie de iniciativas del gobierno de Trump para expandir el uso de la pena de muerte a nivel federal, incluyendo la reactivación de ejecuciones federales tras la pausa durante la administración de Joe Biden. La medida consolida un cambio significativo en la política criminal de la capital estadounidense y promete generar un intenso debate jurídico y político en los próximos meses.