Nacionales
Conoce la realidad sobre los niños héroes
Todos los años, el 13 de septiembre, se conmemoran las acciones patrióticas de los jóvenes que defendieron el Castillo de Chapultepec.
Al igual que Miguel Hidalgo, Jose María Morelos y otros más, los niños héroes forman parte de los personajes emblemáticos de las fiestas patrias del mes de septiembre.
Su labor más heroica fue dar la vida para defender el Castillo de Chapultepec de invasores como Estados Unidos, que el 13 de setiembre de 1846 declaró la guerra a México con el fin de apoderarse de hacerse de los territorios de Alta California, Nuevo México y otros territorios del norte del país.
Sin embargo, existen teorías que señalan que la historia patriótica de los niños héroes no es del todo cierta y su finalidad era resaltar los valores de mexicanidad sobre la amenaza exterior.
Una de las teorías señala que la historia minimiza los esfuerzos de más de 800 soldados mexicanos que fueron apoyados por el batallón activo de San Blas con aproximadamente 400 hombre y medio centenar de cadetes del Colegio Militar y exalta los de Juan de la Barrera, Agustín Melgar, Fernando Montes de Oca, Francisco Márquez, Juan Escutia y Vicente Suárez.
Quizás la escena más polémica es la de Juan Escutia tomando la bandera mexicana y valientemente se arroja desde lo alto del Castillo para que los invasores no la tomarán.
Durante décadas, historiadores han tratado de desmentir esa versión pues aseguran que Escutia murió abatido a tiros junto a Márquez y Montes de Oca, cuando intentaban huir del Jardín Botánico. Por otro lado, la bandera si fue capturada por los norteamericanos y fue devuelta al país en el sexenio de López Portillo.
Nacionales
Restaurante flotante reactiva economía y se convierte en punto de encuentro en Coatzacoalcos
El arribo de un restaurante flotante a las playas de Coatzacoalcos no solo despertó curiosidad entre los habitantes, sino que también ha contribuido a reactivar la economía local.
Decenas de familias han acudido al malecón costero para tomarse fotos, convivir y disfrutar del ambiente, mientras comerciantes de nieve, cocos, chicharrones y antojitos aprovechan el incremento en la afluencia de visitantes.
Lo que en un inicio llegó como consecuencia de las inundaciones en el norte del estado, hoy se ha transformado en un espacio de reunión familiar y atractivo turístico improvisado en la ciudad.





