Internacionales
Conductor de televisión y su pareja hallados sin vida: Policía acusado del crimen sacude a Australia

Una tragedia estremecedora ha sacudido a Australia con el macabro hallazgo de los cuerpos del exreportero de televisión Jesse Baird y su pareja Luke Davies, encontrados muertos bajo piedras y escombros en una propiedad rural cerca de Bungonia, a 200 kilómetros al suroeste de Sidney.
El descubrimiento, producto de una intensa búsqueda, se produjo después de que Beau Lamarre-Condon, oficial de policía y expareja de Baird, proporcionara información crucial a las autoridades. Los cuerpos estaban ocultos dentro de bolsas de surf idénticas a las que el presunto asesino habría utilizado para transportarlos desde la casa de Baird.
Lamarre-Condon, bajo arresto y acusado del asesinato, fue detenido después de que se descubriera su presunta participación en el crimen. Se sospecha que inicialmente dejó los cuerpos en la propiedad y regresó más tarde para moverlos, temiendo que su compañero de viaje revelara su paradero.
La noticia ha generado conmoción en la comunidad LGBTQ de Sidney, que ha solicitado a la policía no participar en el desfile del Mardi Gras este fin de semana. Esta decisión ha desatado un debate entre los organizadores del evento, legisladores de la oposición y el Primer Ministro, Anthony Albanese.
A pesar del duelo de la comunidad LGBTQ, Albanese ha subrayado la importancia de mantener relaciones positivas entre la policía y dicha comunidad, descartando retirar el financiamiento del Mardi Gras y enfatizando el progreso en las relaciones entre ambas partes.
La investigación del crimen continúa en curso, con la detective Sasha Pinazza a cargo del caso, quien lo ha calificado como un “maravilloso resultado para las familias” después de días de arduo trabajo.
Internacionales
Donald Trump ordena implementar la pena de muerte en Washington D.C.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó un memorándum dirigido a la fiscal general, Pam Bondi, y a la fiscal del Distrito de Columbia, Jeanine Pirro, en el que instruye la implementación “plena” de la pena de muerte en la capital estadounidense. La medida revierte la abolición de la pena capital en Washington D.C., vigente desde 1981, y busca responder a lo que la administración califica como un aumento de la criminalidad en la ciudad.
Según el memorándum, los fiscales federales deberán buscar la pena de muerte en todos los casos apropiados bajo la legislación federal, particularmente en delitos graves como homicidios y asesinatos de agentes de policía. Además, se indica que ejercerán jurisdicción federal para garantizar la aplicación de la pena capital, en lo que la administración Trump considera una acción necesaria para mantener la seguridad.
La decisión ha generado un amplio debate. Expertos legales y organizaciones de derechos civiles han expresado su preocupación por la posible violación del derecho de autogobernanza de Washington D.C., cuya población ha rechazado la pena de muerte en referendos anteriores. También se cuestiona el impacto de esta medida sobre las normas legales y la autonomía local.
Esta acción forma parte de una serie de iniciativas del gobierno de Trump para expandir el uso de la pena de muerte a nivel federal, incluyendo la reactivación de ejecuciones federales tras la pausa durante la administración de Joe Biden. La medida consolida un cambio significativo en la política criminal de la capital estadounidense y promete generar un intenso debate jurídico y político en los próximos meses.