Internacionales
Cientos de migrantes esperan agolpados ante puertas fronterizas de EU y México

Cientos de migrantes esperan bajo el sol, frente a las puertas de la valla fronteriza que separa México de Estados Unidos, a que las autoridades los deporten o los procesen, a dos días de que expire el Título 42, la norma que permite expulsiones en caliente por motivos de salud pública.
La puerta 42, ubicada a unos 18 kilómetros al este de El Paso, se abre este medio día, pero solo levemente, para dejar pasar a algunos guardias de la Patrulla Fronteriza que la cruzan.
Al otro lado de la valla metálica de cinco metros y medio de altura, sin sombra donde cobijarse del sol salvo algunos plásticos, medio millar de migrantes espera más allá de los hierros, pero más acá del río Bravo, que marca la frontera entre ambos países.
Se han entregado a las patrullas fronterizas y ahora las autoridades estadounidense deberán decidir si los expulsan por la vía exprés aplicando el Título 42 o si aceptan que comiencen el proceso de solicitud de asilo.
Un agente de estas patrullas, que habla bajo condición de anonimato, asegura que el número de detenciones diarias o “encuentros” en el mes mayo ha sido de mil 150 al día, por debajo de la media del mes de abril que, según el patrullero, fue de alrededor de mil 400 arrestos fronterizos por día.
A unos metros de la puerta, el funcionario explica que quienes intentan entrar van cambiando de lugar y que los intentos de cruzar se están moviendo hacia el este.
“Ahora nos estamos preparando para el levantamiento del Título 42” subrayó, antes de precisar que están aumentando la capacidad de los centros de procesamiento en El Paso y que esperan tener unas nuevas instalaciones con capacidad para 1.000 personas lista el próximo junio.
Internacionales
Congreso de Perú aprueba informe que acusa a Pedro Castillo por actos de corrupción

El pleno del Congreso de Perú aprobó un informe final que recomienda acusar al expresidente Pedro Castillo (2021-2022) por presuntos delitos de corrupción y organización criminal en la ejecución de proyectos de inversión en varias municipalidades y bajo la dirección del ministerio de Vivienda.
El informe final de la Comisión de Fiscalización fue aprobado por 59 votos, después de que el legislador fujimorista Héctor Ventura lo sustentó y recomendó formular acusación constitucional contra Castillo, el exministro de Vivienda Geiner Alvarado, la esposa del exmandatario Lilia Paredes, su hermana Yenifer Paredes, altos funcionarios, alcaldes y empresarios involucrados.
La investigación parlamentaria sostiene que los delitos de corrupción se cometieron durante la ejecución de proyectos de inversión en el contexto de la actuación de una presunta organización criminal, liderada por Castillo, según indicó el Congreso en Twitter.
Los delitos fueron denunciados en reportajes periodísticos en los que se observó a la hermana de Lilia Paredes, Yenifer Paredes, acudiendo a ofrecer obras de saneamiento en distritos rurales con el financiamiento del ministerio de Vivienda o de los municipios, a cargo de empresas de amigos suyos y en las que ella misma trabajaba.
A raíz de estos hechos, Castillo iba a ser sometido a un juicio político por el Parlamento y debía presentarse ante el pleno para responder a las denuncias en su contra, cuando decidió el pasado 7 de diciembre anunciar un golpe de Estado, el cierre del Congreso e instaurar un gobierno de emergencia.
El exmandatario fue detenido minutos más tarde de su anuncio de un “autogolpe” y recluido en el penal de Barbadillo por el presunto delito de rebelión, mientras que su esposa e hijos viajaron a México, donde el mandatario de ese país les dio asilo.
Precisamente, este jueves, la Fiscalía indicó que Lilia Paredes puede ser condenada a un mínimo de ocho años de prisión en el proceso que se le sigue por presuntamente integrar en una organización criminal al interior del Gobierno de Perú.
“Este Ministerio Público concluye, como prognosis concreta de pena (conocimiento anticipado de un suceso), que al momento de llegarse a condenar, si es que así fuera, se le impondría no menos de 8 años de pena privativa de la libertad”, sostuvo el fiscal José García al exponer durante una audiencia judicial para pedir su detención preventiva.
Al presentar los argumentos del pedido de variación de comparecencia simple a 28 meses de prisión preventiva contra Paredes y otros investigados, el fiscal dijo que se atribuye a la ex primera dama ser “coordinadora de una presunta red criminal en el Ejecutivo” que presidió su esposo entre julio de 2021 y diciembre de 2022, cuando fue destituido por el Congreso tras intentar dar un golpe de Estado.