La conferencia de prensa del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador se vio interrumpida por bostezos y uno que otro ronquido ya que algunos niños de entre seis y siete años visitaron Palacio Nacional en conmemoración del Día del Niño.

Durante el evento, los niños se mostraron aburrido a pesar de que ésta duró solamente una hora, se acurrucaron en las sillas y recargaban su cabeza en el respaldo para poder dormir mientras el presidente contestaba preguntas de reporteros.

Luego de que la conferencia llegara a su fin, los menores disfrutaron de un desayuno con el presidente.