Ciencia y Tecnología
Shorts de YouTube dejarán de estar disponibles en junio

YouTube ha anunciado que a partir del 26 de junio la opción para crear historias ya no estará disponible en la plataforma y que aquellas que se publiquen ese mismo día, caducarán siete días después de haberse compartido por primera vez.
Las historias son vídeos breves que tienen una vida de una semana y que solo se pueden crear con dispositivos móviles. Con ellas, los creadores de contenido pueden conectar con sus audiencias de manera informal, estén donde estén.
Hasta ahora, este formato estaba en fase beta y a disposición de los canales con más de 10.000 suscriptores, aunque, una vez un canal alcanza esta audiencia, la funcionalidad puede tardar hasta siete días en aparecer.
YouTube no permite crear estas historias en caso de que el contenido del canal se haya marcado como creado para niños o bien si se está utilizando esta aplicación de contenido audiovisual a través de una cuenta supervisada.
La compañía ha anunciado ahora que la opción de crear historias dejará de estar disponible a partir del 26 de junio de este año y que aquellas que se publiquen ese mismo día tendrán su permanencia habitual, de siete días, de modo que pasada esa semana desaparecerán.
YouTube ha dicho que, aunque este formato vaya a desaparecer, considera que otras de las alternativas que ofrece, como YouTube Shorts y las publicaciones de la Comunidad “son excelentes alternativas que pueden brindar valiosas conexiones y conversaciones con la audiencia”.
Finalmente, ha expresado en un comunicado su compromiso para “invertir en herramientas nuevas e innovadoras” para ayudar a los creadores de contenido a aumentar su audiencia en YouTube.
Ciencia y Tecnología
Pastilla consigue detener varios años avance de un tumor cerebral maligno

La investigación oncológica acaba de ofrecer razones para la esperanza a quienes tienen un glioma de grado 2 con mutación en el gen IDH, un tumor cerebral maligno para el que se ha descubierto un tratamiento oral que consigue detener varios años su evolución.
Los resultados del ensayo en fase III INDIGO se presentaron en el marco del congreso anual de la Sociedad Americana de Oncología Clínica (ASCO, por sus siglas en inglés), que se celebra desde el pasado viernes y hasta este martes en Chicago, y han sido publicados también en la revista The New England Journal of Medicine.
En el estudio, liderado por Estados Unidos, participaron 331 pacientes en 10 países, incluido España.
El Hospital 12 de Octubre de Madrid, que ha formado parte de la investigación, explica que estos gliomas de bajo grado con mutación del gen IDH representan en torno al 30 por ciento de los tumores cerebrales. Crecen de forma continua, aunque lenta, se infiltran en el cerebro y finalmente se convierten en tumores agresivos con crecimiento acelerado y síntomas graves.
Sus afectados suelen ser jóvenes, entre los 25 y los 50 años, y su tratamiento actual pasa por una intervención quirúrgica para extirparlo y por radioterapia y quimioterapia para tenerlo bajo control, pero estas dos últimas tienen una toxicidad significativa.
Los enfermos participantes en el estudio solo habían sido operados.
INDIGO es el primer estudio de fase III que se ha podido efectuar en ese tipo de pacientes que no habían recibido ni radio ni quimio, según explica el doctor Juan Manuel Sepúlveda, coordinador de la Unidad de Neurooncología del Hospital 12 de octubre y único autor español de ese ensayo. Su centro comenzó a reclutar a pacientes para el mismo en 2020.
Aunque la quimiorradiación puede prolongar la vida en buenas condiciones entre 5 y 20 años, al cabo del tiempo sus efectos secundarios se traducen en deterioro cognitivo y dificultades motoras y de concentración, entre otras.
El inhibidor vorasidenib, protagonista del ensayo, ha demostrado que consigue que se preserven y mejoren las capacidades cognitivas y funcionales y por ende la calidad de vida de los pacientes durante años, al detener la progresión del tumor y retrasar los tratamientos agresivos.
Esa pastilla prolongó una media de 27.7 meses la supervivencia libre de progresión de la enfermedad, frente a los 11.1 meses de quienes tomaron placebo, y pospuso más de 40 meses la necesidad de tratamiento agresivo, siendo en algunos casos indefinida.
ASCO precisa en su página web que los efectos secundarios negativos más comunes con el vorasidenib fueron niveles elevados de las enzimas transaminasas y diarrea. Salvo eso, el tratamiento resultó bien tolerado.