La señora Cristina Palma enfrenta a sus 79 años la pérdida de sus tres por el COVID-19, reside en el barrio de Tepito en la Ciudad de México, en donde miles de familias viven su misma situación por el virus.

Narra para el diario La Crónica que el virus que muchas personas lamentablemente aún afirman que no existe, la dejó sin familia, al perder a sus tres hijos Luis, Sergio y Manuel, quienes aseguraron que el COVID-19 no existía y hoy están sepultados en el cementerio tras enfrentarlo y morir en una semana.

Doña Cristina manifiesta a este medio, en entrevista, que nunca imaginó que pasaría por esta situación generada por la pandemia, al reconocer que ella misma, al igual que sus tres hijos, creyó que el COVID-19 “no era verdadero y que era juego o invento”.

Explica que sus hijos, quienes eran vendedores ambulantes y conocidos como los “Pachecos” entre las vecindades de este popular barrio capitalino, fueron advertidos por sus propios familiares sobre el COVID-19 pero jamás hicieron caso respondiendo que “de algo se tenían que morir” y hoy ya no están.