Internacionales
Dispersa policía de Guatemala caravana migrante hondureña
Policías y soldados guatemaltecos dispersaron este lunes por la fuerza una caravana con miles de migrantes hondureños, apostados durante el fin de semana en una carretera en el poblado de Vado Hondo (este), postergando su aspiración de llegar a pie a Estados Unidos.
El contingente policial avanzó sobre la masa haciendo un fuerte ruido mediante el golpe de sus macanas contra escudos, logrando que muchos migrantes retrocedieran y otros corrieran hacia los lados, dispersándose dentro del pueblo, pero aún en territorio guatemalteco.
“No estábamos robando, somos gente de bien. Sólo queremos pasar”, dijo a la AFP al borde del llanto Angie, migrante hondureña de 21 años, que junto a miles de sus compatriotas mira en Estados Unidos mejores oportunidades económicas.
En el desalojo, varios de los caminantes lanzaron piedras a la policía, que respondió con gas lacrimógeno para seguir alejándolos en dirección a la frontera con Honduras, ubicada a unos 50 kilómetros.
La operación policial puso a correr a muchas familias, entre ellas madres con niños pequeños.
“Yo voy con mi hijo, yo en Honduras no tengo donde vivir”, señaló otra mujer al canal Guatevisión, tras la estampida y mientras tomaba aliento al lado de un poste.
Unas 4 mil personas permanecían en ese grupo, de las 9 mil que se estima ingresaron con la caravana.
Otros 800 han sido contenidos en un pueblo vecino, cientos se han dispersado por los alrededores y al menos mil 568 personas han retornado a Honduras, entre ellas 208 menores.
La carretera donde los migrantes estaban desde el sábado, quedó despejada para el avance del transporte de carga, cuya mercancía corría el riesgo de estropearse.
Internacionales
Trump confirma destrucción de submarino usado para tráfico de drogas en el Caribe
Washington, D.C.– El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó que las fuerzas estadounidenses destruyeron un submarino semisumergible que estaba siendo utilizado para el tráfico de drogas en el mar Caribe, cerca de la costa venezolana.
El ataque, realizado el 16 de octubre de 2025, dejó un saldo de seis presuntos narcotraficantes muertos y dos sobrevivientes capturados, quienes actualmente permanecen bajo custodia en un buque de la Marina de los Estados Unidos. Trump calificó a los atacantes como “narcoterroristas” y señaló que el gobierno de Nicolás Maduro ha ofrecido “todo” para evitar un enfrentamiento directo con Estados Unidos.
Estas acciones forman parte de una campaña militar estadounidense dirigida a combatir el narcotráfico en la región, que ha incluido ataques a embarcaciones vinculadas a organizaciones criminales venezolanas desde septiembre de 2025.
El gobierno de Venezuela ha reaccionado denunciando estas operaciones como violaciones a su soberanía y ha movilizado a su milicia, mientras que en Estados Unidos algunos legisladores cuestionan la legalidad de los ataques sin la aprobación del Congreso.
Trump enfatizó que las acciones buscan interrumpir las rutas de narcotráfico y desmantelar las estructuras criminales en la región, reafirmando el compromiso de su administración de mantener el control sobre el tráfico de drogas en el Caribe.
El hecho genera preocupación internacional por la escalada de operaciones militares y plantea interrogantes sobre las relaciones entre Estados Unidos y Venezuela, así como sobre la seguridad en la región fronteriza del Caribe.





