Cada año entran por Tabasco 5 mil niños migrantes sin acompañamiento, 90 por ciento de los cuales son víctimas de explotación que va desde abuso sexual a tráfico de órganos, alertó Alejandra Arias, presidente de la asociación civil Aldea Por los Niños.

Afirmó que incluso a esos menores de edad les llaman los “niños invisibles” debido a que solo se tiene un reporte, registro o noción de su ingreso, pero no de su destino o punto final de viaje ni las condiciones en las que transitan.

De hecho, sostuvo, de acuerdo con reportes de organismos internacionales de protección a la niñez, se estima que por lo menos 90 por ciento de eso menores que ingresan son explotados sexualmente en el norte del país e incluso para extraer sus órganos y vender éstos en el mercado negro internacional.

Aldea por los Niños, afirmó, ha tenido conocimiento de estos casos debido a que a ayudado a solicitar asilo a varios menores centroamericanos que ingresan sin acompañantes.

Lamentó que esos menores no reciben una atención sistematizada por parte de los gobiernos federal, estatal y municipal a pesar de que sí está contemplado en la ley.

“Nosotros como organización civil hemos sido testigos de esto”, dijo.

“Se ha documentado que la mayoría de estos niños que no reciben esta atención que marcan los tratados internacionales, son niños que son victimizados, explotados, e incluso hubo un informe que señala que muchos de ellos son utilizados para el tráfico de órganos, para la trata de infantes, para la explotación sexual… muchos son llevados al norte para la explotación sexual y se ha documentado”, sostuvo.

— ¿De estos 5 mil casos, cuántos presentan esas condiciones?

Prácticamente 90 por ciento y de hecho se les ha llamado niños invisibles porque son niños que ingresan, pero se les pierde la pista precisamente porque el estado por donde ingresan, no cumple lo que señalan los tratados internacionales.

Es necesario, remarcó, que la Secretaría de Gobernación diseñe políticas públicas para atender a la niñez migrante y no crear únicamente “áreas de ocurrencia”.