Internacionales
Ucrania suspende la destrucción de minas antipersonas debido a la invasión rusa
Ucrania ha renunciado a su compromiso de destruir el arsenal de minas antipersona, que data de la era soviética y asciende a cerca de seis millones de unidades. Esta decisión se debe a la invasión rusa, que ha utilizado minas antipersona en diversas regiones de Ucrania, causando devastación en ciudades, estaciones de transporte y áreas agrícolas. Yevguenii Kivshik, representante del Ministerio de Defensa de Ucrania, explicó que la destrucción de minas se ha visto limitada por los constantes bombardeos y la ocupación de territorios por parte de las fuerzas rusas.
Kivshik mencionó que, a pesar de los desafíos, Ucrania ya ha destruido 2.5 millones de minas, pero que las condiciones de guerra y los recursos limitados impiden continuar con el proceso de eliminación de armas. En su intervención en una cumbre internacional en Camboya, el funcionario destacó que la agresión rusa ha obligado a modificar los planes de destrucción de estas reservas de minas.
Por otro lado, Ucrania acusó a Rusia de utilizar minas antipersona en áreas densamente pobladas, poniendo en riesgo la vida de seis millones de ucranianos. En la misma conferencia, Oleksandr Riabtsev, otro representante ucraniano, acusó a Moscú de llevar a cabo “actividades genocidas” con el uso de estos explosivos en lugares públicos y viviendas.
En la cumbre de la Convención de Ottawa, que examina la implementación de la prohibición mundial de las minas antipersona, también se discutió la controversia sobre el suministro de minas por parte de Estados Unidos a Ucrania. Organizaciones como la Campaña Internacional para la Prohibición de Minas Antipersona criticaron el uso de estas armas, destacando los peligros que siguen representando mucho tiempo después del conflicto.
Internacionales
Crisis en Corea del Sur: Yoon Suk-yeol declara ley marcial y estallan protestas
El presidente de Corea del Sur, Yoon Suk-yeol, decretó la ley marcial acusando al principal partido de oposición de planear actividades “anti-estatales” y ser “pro-norcoreano”. La medida, anunciada en un discurso televisado, busca proteger el “orden constitucional” en medio de tensiones políticas tras la aprobación de presupuestos que excluyeron al partido gobernante.
La declaración otorga amplios poderes al Ejército y suspende actividades legislativas, mientras miles de ciudadanos protestaron frente a la Asamblea Nacional, enfrentándose a un fuerte dispositivo de seguridad. Las tropas surcoreanas intentaron tomar el control del Parlamento, lo que generó enfrentamientos con civiles y provocó disturbios en redes sociales.
Bajo la ley marcial, los derechos ciudadanos se limitan y las fuerzas armadas asumen roles de seguridad pública. La situación ha provocado un estado de alta tensión política y social, con llamados de la oposición y organizaciones internacionales a restablecer el orden democrático en Corea del Sur.