Internacionales
Israel bombardea mezquita en Cisjordania, alega vinculación con grupos extremistas

Las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF) informaron en las primeras horas de este domingo que llevaron a cabo un ataque aéreo contra una mezquita en Jenin, Cisjordania. Según las IDF, esta mezquita, conocida como Al-Ansar, estaba siendo utilizada como “infraestructura terrorista subterránea” por grupos extremistas, incluyendo Hamás y la Jihad Islámica.
Según el medio local Haaretz, la mezquita se encuentra ubicada en el campo de refugiados de Jenin en Cisjordania. Las autoridades israelíes afirman que una célula terrorista operaba desde esta mezquita y había planeado llevar a cabo un ataque “inminente”. Además, se alega que esta célula fue responsable de varios ataques en los últimos meses.
Las IDF declararon que la mezquita había servido como centro de comando y planificación de operaciones terroristas. Tras recibir información de inteligencia que indicaba los planes de los terroristas para llevar a cabo un “ataque significativo”, se decidió llevar a cabo el ataque.
Este bombardeo en una mezquita en Cisjordania ocurre en medio de una escalada de violencia entre Israel y Hamás, que comenzó con la incursión de milicianos de Hamás en territorio israelí el 7 de octubre, seguida de ataques que han dejado un alto número de muertos y rehenes israelíes.
La escalada también ha afectado a Cisjordania, donde se ha informado del asesinato de palestinos y ataques a la población palestina por parte de las fuerzas de ocupación israelíes y colonos israelíes. Se han registrado tensiones crecientes en esta región, que no está bajo control de Hamás, sino de la Autoridad Nacional Palestina.
El conflicto entre Israel y Palestina sigue generando preocupación y tensiones en la región, y la escalada de violencia en diversas áreas está siendo monitoreada de cerca por la comunidad internacional.
Internacionales
Irán ahorca a hombre acusado de espiar para Israel en medio de ola de ejecuciones

DUBÁI, Emiratos Árabes Unidos (AP).- Irán informó este día que ejecutó por ahorcamiento a Bahman Choobiasl, acusado de espiar para Israel, en lo que representa la mayor ola de ejecuciones en décadas en el país.
El caso no fue conocido de inmediato en los medios iraníes ni entre activistas que monitorean la pena de muerte en la República Islámica. La ejecución se produce en un contexto de tensiones internacionales, luego de que la ONU reimpuso sanciones a Teherán por su programa nuclear, y mientras el gobierno iraní prometió enfrentarse a sus enemigos.
Expertos en derechos humanos señalan que esta acción forma parte de un patrón de represión en el que las autoridades iraníes aplican la pena capital en casos de espionaje y delitos considerados de seguridad nacional, generando preocupación internacional.