La detección de un caso de gusano barrenador en un becerro en el municipio de Sabinas Hidalgo, Nuevo León, ha generado alerta entre los ganaderos de Coahuila, quienes consideran que este hallazgo podría retrasar aún más la reapertura de la frontera para la exportación de ganado hacia Estados Unidos.

Aunque el caso corresponde a un becerro que presentaba la larva en fase 2, y no a la mosca transmisora de la contaminación, los productores señalan que las autoridades estadounidenses podrían tomar medidas precautorias, dada la cercanía del brote a la frontera.

Los ganaderos piden reforzar los controles sanitarios y vigilancia para evitar que se propague la plaga, que podría afectar la producción y exportación de ganado en la región noreste del país.