Internacionales
Canadá amenaza con expulsar a México del T-MEC

Fuentes diplomáticas en Ottawa han señalado a EFE que, en medio de la creciente incertidumbre por el regreso de Donald Trump a la presidencia de EE.UU. en enero de 2025, los políticos canadienses están considerando un enfoque provocador, sugiriendo que México podría convertirse en un problema para el comercio norteamericano.
Algunos diplomáticos sugieren que este tono beligerante podría formar parte de una estrategia negociadora de Canadá de cara a la revisión del Tratado México-EE.UU.-Canadá (T-MEC) en 2026, buscando obtener concesiones dolorosas, ya que una salida de México del tratado es “casi imposible” debido a la fuerte interconexión económica entre los tres países. Sin embargo, también hay expertos que creen que la crítica canadiense no es solo táctica, sino que responde a un descontento más profundo con la integración de México en el acuerdo, que data de 1994, cuando el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) amplió su alcance a México.
El sector automotriz ha sido identificado como el principal punto de fricción en este debate. Nelson Wiseman, profesor emérito de Política en la Universidad de Toronto, explicó que Canadá no estaba a favor de incluir a México en el TLCAN en 1994, y desde entonces la industria automotriz canadiense ha visto cómo se ha visto desplazada por la competencia mexicana. La reciente declaración de Doug Ford, primer ministro de Ontario, el 12 de noviembre, refleja este malestar. Ford criticó a México por no unirse a los EE.UU. y Canadá en la imposición de aranceles al automóvil chino, y por permitir que los fabricantes chinos se establezcan en su territorio, lo que, según él, podría desplazar empleos en Ontario.
Aunque el Partido Liberal de Canadá, liderado por el primer ministro Justin Trudeau, ha sido tradicionalmente un firme defensor del T-MEC, las bajas cifras de popularidad de Trudeau, que actualmente se encuentra más de 20 puntos por detrás de la oposición conservadora, están empujando al gobierno a adoptar posturas más nacionalistas y proteccionistas. En un reciente comentario, Trudeau defendió el acuerdo comercial como un “éxito” pero dejó abierta la puerta a la revisión de los términos para “defender los intereses de los trabajadores y la economía canadiense”.
La política de Trudeau ha evolucionado hacia posiciones más cercanas a las del Partido Conservador. Este cambio de tono también se ha reflejado en otras decisiones, como el regreso de la exigencia de visados para los visitantes mexicanos, una medida que había sido derogada por Trudeau en 2015 pero que fue reintroducida en 2024.
La cuestión de la relación comercial con México podría ser un tema clave en las elecciones federales canadienses previstas para finales de 2025, aunque podrían adelantarse debido a la fragilidad del gobierno de Trudeau en el Parlamento. Pierre Poilievre, líder del Partido Conservador, ha afirmado que luchará contra Trump si se imponen aranceles a Canadá, lo que podría significar el fin del T-MEC y profundizar las tensiones en la región. La relación de Canadá con México, y su participación en el T-MEC, continuará siendo un tema crucial en los próximos años, especialmente con el regreso de Trump a la Casa Blanca.
Internacionales
Angelo Becciu, expulsado por el Papa Francisco por fraude, busca participar para elegir al nuevo líder de la Iglesia Católica

De la ficción a la realidad. El Papa Francisco removió al italiano Angelo Becciu de su cargo debido a su implicación en un fraude financiero, quitándole además sus privilegios como cardenal, incluyendo el de asistir al cónclave. Sin embargo, Becciu ha hecho acto de presencia en la reunión de cardenales, defendiendo que tiene derecho de participar.
En diciembre de 2023, Becciu fue condenado por el tribunal penal del Vaticano a cinco años y medio de prisión por delitos de malversación y estafa. Además, se le impuso una inhabilitación perpetua para ejercer cargos en la Santa Sede y una multa de 8.000 euros.
Principales irregularidades.
Compra fallida en Londres: Durante su gestión como sustituto de Asuntos Generales en la Secretaría de Estado (2011-2018), Becciu autorizó la adquisición de un edificio de lujo en Londres, operación que generó pérdidas estimadas en más de 100 millones de euros para la Santa Sede.
Transferencias a familiares y conocidos.
Se descubrió que desvió fondos del Vaticano a una cooperativa dirigida por su hermano en Cerdeña y a una cuenta de Cáritas manejada por su primo, sin fines caritativos reales.
También transfirió más de medio millón de euros a una amiga, Cecilia Marogna, bajo el pretexto de liberar a una monja secuestrada, pero el dinero se gastó en lujos personales.
“El juicio del siglo del Vaticano”.
Este caso marcó un hito al ser la primera vez que un cardenal era juzgado por un tribunal penal del Vaticano. El Papa Francisco, en su lucha contra la corrupción dentro de la Iglesia, le retiró a Becciu sus derechos cardenalicios en 2020, incluyendo el de participar en futuros cónclaves.
El proceso de apelación está en curso, y hasta que se emita una sentencia definitiva, Becciu no ingresará en prisión. Mientras tanto, se ha aferrado a participar en eventos públicos como cardenal y, a pesar de la condena y las sanciones, Becciu dice que es inocente y que debe participar para ser Papa.