Internacionales
Albarracín, el encantador pueblo español que seduce a la UNESCO para ser Patrimonio de la Humanidad
Desde hace décadas, la UNESCO ha puesto sus ojos en España, no solo por su atractivo turístico, sino también por su rica combinación de paisajes y arquitectura, como demuestra el encantador pueblo de Albarracín, que ahora se encuentra en proceso de ser considerado Patrimonio de la Humanidad.
Ubicado en la provincia de Teruel, en la comunidad autónoma de Aragón, Albarracín ha sido reconocido como el pueblo más bonito de España por la Asociación de los pueblos más bonitos de España. Su singular belleza y su valioso patrimonio histórico y cultural lo han colocado en la lista de posibles sitios de la UNESCO.
Este pintoresco pueblo medieval, con apenas 1000 habitantes, destaca por su arquitectura única de tapial y piedra, calles empedradas, casas solariegas y palacios que evocan la esencia de la Edad Media. Su intrincada distribución de laberinto, con callejuelas, escaleras y pasadizos, invita a perderse y descubrir sus encantadores rincones.
Pero lo que verdaderamente ha cautivado a la UNESCO es el arte rupestre levantino de Albarracín, declarado Patrimonio Mundial en 1998. Estas pinturas esquemáticas, que datan del Epipaleolítico y la Edad de Bronce, ofrecen un testimonio excepcional de las sociedades prehistóricas que habitaron la región, plasmando escenas de caza, recolección y rituales en las paredes rocosas de la sierra.
La combinación de su impresionante arquitectura medieval y su invaluable patrimonio de arte rupestre hacen de Albarracín un candidato ideal para ser reconocido como Patrimonio de la Humanidad, un título que no solo enorgullecerá a España, sino que también lo situará en el mapa mundial como un destino culturalmente significativo.
Internacionales
Trump confirma destrucción de submarino usado para tráfico de drogas en el Caribe
Washington, D.C.– El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó que las fuerzas estadounidenses destruyeron un submarino semisumergible que estaba siendo utilizado para el tráfico de drogas en el mar Caribe, cerca de la costa venezolana.
El ataque, realizado el 16 de octubre de 2025, dejó un saldo de seis presuntos narcotraficantes muertos y dos sobrevivientes capturados, quienes actualmente permanecen bajo custodia en un buque de la Marina de los Estados Unidos. Trump calificó a los atacantes como “narcoterroristas” y señaló que el gobierno de Nicolás Maduro ha ofrecido “todo” para evitar un enfrentamiento directo con Estados Unidos.
Estas acciones forman parte de una campaña militar estadounidense dirigida a combatir el narcotráfico en la región, que ha incluido ataques a embarcaciones vinculadas a organizaciones criminales venezolanas desde septiembre de 2025.
El gobierno de Venezuela ha reaccionado denunciando estas operaciones como violaciones a su soberanía y ha movilizado a su milicia, mientras que en Estados Unidos algunos legisladores cuestionan la legalidad de los ataques sin la aprobación del Congreso.
Trump enfatizó que las acciones buscan interrumpir las rutas de narcotráfico y desmantelar las estructuras criminales en la región, reafirmando el compromiso de su administración de mantener el control sobre el tráfico de drogas en el Caribe.
El hecho genera preocupación internacional por la escalada de operaciones militares y plantea interrogantes sobre las relaciones entre Estados Unidos y Venezuela, así como sobre la seguridad en la región fronteriza del Caribe.





